miércoles, 12 de noviembre de 2008

Nefasto día de bici

Bueno, después de algunas semanas volvemos a la carga.

OBJETIVO:
Llegar a Riba Roja del Túria por el río Túria desde al Palau de la música.

La cosa no parecía tan difícil a primera vista, pero antes de dejar parque de Cabecera Tomás se retrasa y ... ¡Ya a pinchao el Tomás!. No pasa nada, estamos preparados, tenemos cámaras y bombín, a la par que expertos mecánicos. Del cambio de rueda se hace cargo Andreu, en poco mas de 20 minutos rueda cambiada.


Continuamos, vamos con un poco de retraso, pero no pasa nada, con nuestras poderosas piernas recuperaremos el tiempo perdido.

Pero de pronto... Tomas, again!! Rueda pinchada, la misma!!! que paciencia hay que tener.
En esta ocasión, relevé a Andreu en las labores de mecánico (vistos los resultados) y me encargué yo mismo del cambio, 15 minutos mas tarde seguimos.

La ruta no la tenemos clara del todo, pero mas o menos recordamos nuestra última fallida aventura en busca del camino. Seguimos por la carretera entre los campos de naranjos y de repente una verja nos corta el camino, pero ¿esto que es? es nuestro camino, no nos lo pueden cortar. No pasa nada, vamos en mountainbike, podemos atravesar montañas si es necesario, así que tomamos una carretera alternativa y a mitad atravesamos los campos de naranjos hasta llegas a "nuestro camino". ¡Que guays que somos!
Por fin llegamos al camino, lo seguimos y... ¿pero que es esto? Si no tiene salida... a ver si nos hemos equivocado... pues sí, no era por aquí, a volver a atravesar al campo de naranjos y a buscar el camino.

Vale, la carretera que nos habíamos pasado era la que tocaba, atravesamos la V30 por bajo y empieza el recorrido por el río Túria. No está mal, es algo tarde, pero esto está muy bonito, después de 200 metros el camino se corta... uffff está claro que hoy no es nuestro día.

Volvemos marcha atrás y nos metemos por una carretera en contra de dirección que transcurre paralela al río, pero esto de ir en contra de dirección no es buena idea ¿no? así que nos arrepentimos y volvemos, pero detectamos un camino de tierra que no habíamos visto y nos metemos en el.

¡Por fin ¡, este si es el camino correcto! Continuamos por el camino no sin atravesar alguna nueva dificultad como las obras del AVE y seguimos paralelos al río. El camino no está mal, de vez en cuando cruzamos el río por puentes provisionales (los bonitos de madera están en obras) .

Como ya es tarde decidimos parar a almorzar, a las 11:30 en Manises, nos pegamos el almuerzo de rigor y para casa.

En resumen, 2:30 horas para ir a Manises y 45 minutos para volver con un total de 40 km.

La próxima vez llegaremos a Riba Roja, o al menos eso espero.

3 comentarios:

PePo dijo...

jeje tardas más en llegar a Manises que yo en venir desde Asturias jeje.

Anónimo dijo...

Menos mal que Martín tenia un Plan!!, pareciamos los bicivoladores saltando acequias y yendo por los campos de naranjos... pero Manises está más cerca de Ribarroja!!! A la próxima!!!

Anónimo de Peris y Valero

Anónimo dijo...

A ver si Don Tomás se compra una bici nueva antipinchazos y me regala la suya, que se la han dado defectuosa :P